28 diciembre, 2018
El pasado Domingo 23 vivimos una tarde especial, cargada de emociones, de sentimientos que siempre estarán en nuestro corazón. El cariño que notamos por parte de todos y cada uno de los que llenasteis el Palau, nos hizo crecer en fuerza, en fe; sintiendo el convencimiento de que todo es posible.
Mil gracias a Karmel, sabemos lo que cuesta organizar un concierto de estas características, pero lo que más nos llena es que lo habéis hecho desde el corazón, lo hemos notado en cada nota, en cada imagen, en cada gesto…
Mil gracias a los coros Betsaida y Talitha Kumi con vosotros hemos compartido momentos únicos e inolvidables, y mil gracias a todos los que de una forma u otra habéis contribuido a escribir este esperanzador cuento de Navidad…